Lo ideal es hacer un chequeo anual con el ginecólogo para la detección oportuna. Fertifem en el diagnóstico de lesiones pre-malignas, ofrecer el manejo adecuado, cuando se presenta el cáncer ginecológico. Realizando estudios preventivos en caso de sospecha del cáncer cervical uterino, ovárico y de glándula mamaria. En caso de requerir tratamiento especializado contamos con apoyo de especialistas altamente capacitados en estos casos, para resolver de la mejor manera su problema.
Es un cáncer que comienza en el endometrio, que es el revestimiento o capa interna del útero. Casi todos los cánceres de útero comienzan en el endometrio y son llamados carcinomas endometriales.
Factores de riesgo
El cáncer de ovario puede causar diferentes signos y síntomas como:
El estudio para identificar esta enfermedad, en mujeres menores de 40 años con sospecha de tumor se debe realizar un estudio de ultrasonido y/o resonancia magnética, para la identificación y visualización de la tumoración.
En las mujeres mayores de 40 años, la mamografía más el ultrasonido resultan actualmente el estándar de oro para la detección de tumores de mama.
Nuestra filosofía es ofrecerle a cada paciente un tratamiento individualizado que brinde la mejor opción para resolver la enfermedad oportunamente.
El cáncer cervicouterino, una clase común de cáncer en la mujer, es una enfermedad en la cual se encuentra células cancerosas (malignas) en los tejidos del cuello uterino. El cuello uterino es la abegano hueco en forma de pera donde se desarrolla el feto, y lo conecta con la vagina (canal de nacimiento).
El cáncer cervicouterino suele crecer lentamente por un período de tiempo. Antes de que se encuentre células cancerosas en el cuello uterino, sus tejidos experimentan cambios y empiezan a aparecer células anormales (proceso conocido como displasia). La prueba de Papanicolaou generalmente encuentra estas células. Posteriormente, las células cancerosas comienzan a crecer y se diseminan con mayor profundidad en el cuello uterino y en las áreas circundantes.
Ya que en general no hay síntomas asociados con el cáncer cervicouterino, el médico debe hacer una serie de pruebas para buscar el cáncer. La primera prueba es la de Papanicolaou, que se lleva a cabo usando un pedazo de algodón, un cepillo o una espátula de madera pequeña para raspar suavemente el exterior del cuello uterino con el fin de recoger células. La paciente puede sentir algo de presión, pero generalmente no se siente dolor.
Si se encuentra células anormales, el médico tendrá que extraer una muestra de tejido (este procedimiento se conoce con el nombre de biopsia del cuello uterino y lo observará a través del microscopio para ver si hay células cancerosas. Para efectuar una biopsia sólo se necesita una pequeña cantidad de tejido y puede hacerse en el consultorio médico. Si para hacer la biopsia el médico necesita extraer una muestra mayor en forma de cono (conización), la paciente quizás tenga que ir al hospital.
Es un procedimiento médico especializado que no causa dolor, en el que se usa un equipo especial (colposcopico) para observar mejor por dentro de la vagina y examinarla detenidamente, al igual que el cuello uterino. Con este estudio, se pueden detectar lesiones benignas y precancerosas en etapas tempranas. En caso necesario o sospechoso, se puede tomar una muestra de tejido (biopsia) que permitirá con mayor detalle y hacer un diagnóstico más preciso.
El papanicolaou es el estudio de las células del cuello uterino (cérvix), para determinar si son cancerosas o no y en que grado de malignidad se encuentran.
Son aquellas características o circunstancias identificables que se asocian con un riesgo anormal de poseer, desarrollar o ser especialmente afectado de forma desfavorable por una enfermedad.
AL REALIZARTE ESTOS ESTUDIOS CADA 6 MESES, PUEDES SALVAR TU VIDA (CONSENSO MUNDIAL DE COLPOSCOPIA "RIO DE JANEIRO 2012)
Se ofrecen también captura de Híbridos y PCR en casos específicos.
El término electrocirugía se refiere a la utilización de corrientes eléctricas oscilantes de alta frecuencia con el fin de cortar o coagular el tejido durante el acto quirúrgico. Su uso se remonta a comienzos del siglo XX cuando por accidente se descubre que una corriente eléctrica de alta frecuencia podía separar los tejidos y generar muy poco calor. Sin embargo sólo en la década de 1970 aparecen las unidades electroquirúrgicas que emplean transistores, diodos y rectificadores para generar corriente, las cuales sustentan su función en principios físicos ligados a las propiedades energéticas de los electrones (carga negativa de la parte más pequeña de la materia, es decir, el átomo).
EN LA COLPOSCOPIA LA UTILIZAMOS PARA EL TRATAMIENTO DE LESIONES DE BAJO O ALTO GRADO QUE SON PRECURSORES DEL CANCER CERVICOUTERINO.
La crioterapia es una intervención menor que se lleva a cabo estando usted despierta. El canal vaginal se mantiene abierto de manera que el médico pueda ver el cuello uterino. El médico introduce un dispositivo llamado criosonda en la vagina y lo ubica con firmeza en la superficie del cuello uterino, cubriendo el tejido anormal.
El gas nitrógeno comprimido y refrigerante fluye a través del instrumento haciendo que el metal se enfríe lo suficiente hasta congelarse y destruir el tejido. Se forma una "bola de hielo" en el cuello uterino, que destruye las células anormales. Para que el tratamiento sea más efectivo, la congelación se hace durante 3 minutos, se deja descongelar el cuello uterino durante 5 minutos y luego se repite la congelación por otros 3 minutos.